Dictarán jornada sobre tarifa de riego agrícola y uso racional de la energía
Cómo reducir el costo energético en riego agrícola es el eje de la capacitación que especialistas dictarán en el Valle de Uco, tras un convenio acordado por la Subsecretaría de Agricultura y Ganadería, el Departamento General de Irrigación, la UNCuyo y el municipio de Tupungato destinado a productores agropecuarios del Valle de Uco. La jornada se dictará hoy a las 19 en el hotel Turismo de Tupungato.
El reciente incremento del costo de la energía eléctrica y el aumento del costo de distribución implican rediseñar estrategias e incorporar nueva tecnología que impacte directamente en una disminución del consumo eléctrico o en un uso eficiente del suministro.
Por esto, en la capacitación se explicarán las características del cuadro tarifario especial para regantes, de forma tal que el usuario pueda contratar la más conveniente para su consumo, dadas las particularidades de cada finca y, en este sentido, decidir si necesita el subsidio para riego.
Explica Andrés Eluani, especialista en la materia y uno de los principales disertantes: “El subsidio para riego agrícola no es totalmente recomendable para cualquier productor, debido a que está diseñado de tal manera que, pasando el umbral de consumo, el gasto final es mayor que en una tarifa plana”.
Para conocer qué es lo más adecuado a sus necesidades, en la jornada se explicará a los productores cuáles son los factores que deben tener en cuenta al adherir o bien renunciar a este subsidio que otorga el Estado.
Entre los ítems que Eluani enumera se destacan: la potencia del equipo de bombeo, la proporción de uso de la energía en período de alta y baja y los factores de uso. Con estos elementos en claro, se puede determinar qué tarifa contratar, debido a la variación de precios entre los diferentes cuadros tarifarios de los que disponen la distribuidora para ofrecer a los usuarios del sistema.
Además, se brindarán recomendaciones para disminuir el consumo y aumentar el ahorro energético mediante la reconversión de los sistemas de bombeo para riego con los que se obtiene una reducción de hasta el 60% de los costos, según lo que los especialistas han logrado comprobar en experiencias piloto.