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Exitosa segunda jornada del Festival Música Clásica


Paisajes naturales, bodegas, capillas, plazas y la sala máxima de los mendocinos fueron los escenarios de esta destacada propuesta de otoño.

Se disfrutó este domingo una intensa programación integrada por 7 conciertos, donde los espacios al aire libre tuvieron un gran protagonismo. Los departamentos de Tunuyán, Las Heras, La Paz, Maipú, Junín y Ciudad recibieron a destacados artista de Mendoza, que recorrieron las locaciones.

La segunda jornada comenzó en la Bodega Salentein, ubicada en Tunuyán, con la actuación del dúo compuesto por Nicolás Ojeda, en flauta, y Natalia Suriano, en piano, que engalanaron el reconocido espacio.

Luego, se sumó el tradicional concierto de la Reserva Natural Villavicencio, con la presencia del Coro de Jóvenes de la UNCuyo, dirigido por Ángela Burgoa, y la Orquesta del Programa de Entrenamiento Orquestal, coordinada por Héctor Colombo. Los solistas de la propuesta fueron la soprano Marcela Carrizo, y Fabrizio Colombo, en bandoneón.

A minutos de iniciar la presentación, Silvina Giudici, responsable de la Reserva Natural, dijo: “En nombre de Aguas Danone de Argentina, de la Reserva Villavicencio, en el mío y en el del gerente de planta, Gerardo Sarasola, para nosotros es un placer acompañar a este Festival de Música Clásica por los Caminos del Vino, con este marco maravilloso, que hoy nos recibe más hermoso que nunca, comprometiéndonos, como siempre, con la conservación de nuestro patrimonio histórico y cultural, con este hotel que es parte de la cultura de todos los mendocinos y esta reserva que ya este año cumple 19 años conservando la biodiversidad y el patrimonio de todos”.

Por su parte, el secretario de Cultura, Diego Gareca, también se refirió a la dimensión de este encuentro: “Estamos cumpliendo 20 años en esta edición, que convierte este ciclo de Música Clásica por los Caminos del Vino en uno de los festivales más importantes de la República Argentina. El único que para poder disfrutar de todos los conciertos uno puede recorrer 3.200 km de música clásica, en la provincia de Mendoza”.

El funcionario, además, mencionó locaciones muy importantes que se suman en el vigésimo encuentro. “80 conciertos, muchos de ellos como surgieron originalmente, en bodegas, espacios patrimoniales y desde hace tres años y medio, aproximadamente, agregando las plazas públicas, las locaciones de cada uno de los departamentos de la provincia, pero también, como tenemos este año, conciertos en la Reserva Natural Caverna de las Brujas, en Malargüe, la reserva de biosfera de Ñacuñán, en Huayquerías, en San Carlos, por mencionar sólo algunas locaciones”, finalizó el responsable de Cultura.

Luego de estas palabras, la directora, Ángela Burgoa, puso en marcha el repertorio Misa Tango Misa a Buenos Aires, de Martín Palmeri, que el público disfrutó y no dudó en hacerlo saber a través de un aplauso cerrado.

El tercer concierto se desarrolló en la Capilla Nuestra Señora de la Paz, con la presencia del músico Víctor Garay. Casi en simultáneo, se llevaba a cabo el encuentro en la Bodega Don Bosco, de Maipú, donde el dúo D’Amarü, integrado por María Belén Loüet, soprano y Fernando Germán D’Amanzo, guitarra, dijo presente en la vigésima edición.

La Plaza Eslovenia de Ciudad fue otra de las locaciones al aire libre, con otro destacado dúo compuesto por Eduardo Daract, violín, y Jorge Astrudillo, piano. Jimena Semiz, junto al Cuarteto Ludwig, actuaron en la Bodega Raíces Junín, mientras que el cierre del segundo día fue en el Teatro Independencia, con la presencia del pianista Marcelo Balat.

El público en Villavicencio

Alberto, uno de los entusiastas asistentes del festival, comentó: “Es la segunda visita que hacemos. Anoche fuimos al Teatro Independencia y hoy, acá a la Reserva. Muy linda la propuesta, es la primera vez que venimos. Somos de Maipú, hace muchos años que queríamos participar, colaborar con el Banco de Alimentos y disfrutar de la música y el arte”.

Disfrutando de un buen vino, Sofía y Fernando comentaban: “La verdad es que es un orgullo poder apreciar lo que tiene esta provincia tan hermosa, conjugando un poco lo que es el vino, la música, los paisajes, como acá Villavicencio, que es hermoso, enorgullece y emociona”.

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