Hidráulica extrajo 20 camiones repletos de basura y escombros del Colector Viamonte
La basura arrojada de manera intencional en el cauce que cruza el corazón de Chacras de Coria en Luján de Cuyo impide el escurrimiento del agua de lluvia y genera importantes inconvenientes.
Con recursos y personal propio, la Dirección de Hidráulica realiza tareas para mantener y preservar el buen estado de los cauces aluvionales y, de este modo, mantener una defensa activa en caso de crecidas de agua y lodo. En este caso se trata del Colector Viamonte, entre las calles Besares y Malvinas, en una extensión de 3.500 metros.
Este colector actúa como defensa en el piedemonte y en caso de tormentas o aluviones detiene el agua y el barro, lo reencauza y deriva a zonas donde el riesgo es menor, para finalmente desembocar en el río Mendoza. El cauce pierde su objetivo de drenaje cuando comienza a disminuir su capacidad de conducir el agua de las tormentas, al ser obstruido por los residuos sólidos urbanos que se arrojan en su interior, ya que se trata de un canal revestido en hormigón.
“Hace 15 días que venimos trabajando en este cauce con una retroexcavadora, un camión y una minicargadora. Si bien hemos retirado algo de material de embanque propio del funcionamiento del canal, lo que hemos encontrado son desechos provenientes de la poda de arbustos, que de manera desaprensiva los vecinos tiran dentro del cauce. Por la cantidad de basura que queda, estimo que tendremos 15 días más de labores”, explicó David Cangealosi, director de Hidráulica.
Usos y recomendaciones
Es importante recordar que el cuidado de los cauces aluvionales es fundamental para el saneamiento y armonía tanto de la población como para el buen funcionamiento de canales de riego, colectores y acequias para regado de la arboleda pública.
Por esto, se solicita a la población no utilizar estos lugares como vaciaderos ni dejar residuos en las calles, ya que, después de una tormenta, la basura va a parar a los canales, tapa las alcantarillas y genera inundaciones no previstas.
